No entiendo la afición que tienen algunos/as de comprar mil y un variedades de un solo elemento decorativo. Por ejemplo, mi señora madre tiene su salón repleto de jarrones chinos cada cuál más grande, más alto y para mí cada cuál más molesto. En mi infancia, alguna persecución entre amigos y un giro traicionero se ha llevado lamentablemente alguno , siendo éste reemplazado a la semana por otro el triple de grande. Imparable.
Imparable también es la obsesión que tiene la madre de una amiga por los gnomos de jardín. Casi un centenar vigilan sonrientes el perímetro de la casa . Tal es su obsesión que su colección está en constante crecimiento que creo que no tardaran en que también formen parte del interior del hogar. Por ello el DIY de hoy, si por algún casual os apetece meter al Gnomo dentro, un spray dorado puede darle ese toque que pueda hacer que se integre de forma agradable al salón. Que os parece?
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